Junto a colegas del Círculo de Periodistas de Turismo de Argentina recorrimos gran parte de la quinta Región de Chile. Se destacan por su belleza Reñaca, Viña del Mar y Valparaíso.
Llegamos a Santiago por vía aérea con SKY Airline. El viaje fue rápido y con muy buen servicio abordo.
Desde el aeropuerto por la ruta 68, denominada la ruta del vino, nos dirigimos a la Quinta Región. Una excelente autopista nos llevó bordeando y atravesando cerros y montañas por imponentes túneles para llegar a nuestro destino en Reñaca. Una vez instalados en el hotel Nilahue, ubicado en un lugar privilegiado frente al mar, comenzamos a visitar Viña del Mar y Concon, comprobando los atributos que hacen que estos balnearios convoquen cada vez a más adeptos, tanto a los residentes chilenos como a turistas de todo el mundo y, fundamentalmente de Argentina. Sorprende ver en estos lugares la calidad de sus autopistas, calles y avenidas, como así también la edificación con construcciones que nada tienen que envidiarle a otros balnearios del mundo y gastronomía diversa con lugares ubicados estratégicamente y con todo el modernismo y confort.
La geografía de la Quinta Región presenta amplias playas matizada con morros o cerros También son ponderable las construcciones que ocupan en gran parte los cerros.
Se ubican en sus laderas escalonadamente con calles que les permiten su accesibilidad.
También hay edificaciones que por su lujo y amplitud se las podría denominar
Residencias y no faltan hoteles y locales de diversión y gastronomía.
Dentro de los atractivos turísticos hay diversos paseos tales como la ruta de Albatros, del Cormoran, del Pelicano o del pingüino. Cada uno de estos paseos presenta diversos atractivos que resultan imperdibles para todos.
En un cocktail de bienvenida en el “Sushi Sum Reñaca” tuvimos la oportunidad de dialogar con José Aguirre, jefe del Departamento de Turismo de la Municipalidad de Viña del Mar, que nos comentó las particularidades de la región. Participó del encuentro el Director de Turismo, Arturo Grez. En la noche fuimos recibidos por Olimpio Pizio, dueño del Restaurant Dolce Vita, donde cenamos con una atención especial del tano Olimpio, un personaje increíble y con una predisposición y simpatía desbordante.
En la mañana de nuestro segundo día en Chile conocimos la zona de Casablanca. Allí recorrimos parte de la ruta 68, denominada Ruta del vino. A lo largo de su extensión se encuentran diversas estancias y bodegas que permiten, no solo conocer sus particularidades sino también las diversas características de los vinos y lógicamente poder degustarlos en sus visitas.
Fuimos invitados a una de ellas: “Estancia El Cuadro”, donde realizamos diversas actividades, tales como paseo en carruaje por la viña, visita al jardín de cepas, degustación de vino y visita al museo del vino del siglo XIX. Asistimos a un show folclórico y rodeo en la medialuna, para luego disfrutar del almuerzo.
Por la noche Cesar Márquez nos invitó a cenar en su pizzería “La Gula de Viña del Mar”, donde nos dimos cuenta por qué se denomina “La Gula”, dado que la variedad y exquisitez de sus pizzas dilataron la velada hasta la madrugada.
Al día siguiente visitamos diversos hoteles de la zona, como así también lugares clásicos de Viña del Mar como el Castillo Wulff, el Cerro Castillo, el Reloj de las Flores, diversas playas y el Hotel Casino.
Durante nuestra estadía recibimos todas las atenciones por parte de hoteleros y gastronómicos que hicieron que no nos faltara nada y que nos sintiéramos cómodos y a gusto.
Agradecimientos especiales:
A Santiago Pérez, Gerente del Hotel Nilahue, Jorge Geraige, Gerente del Apart Hotel Reñaca Inn; Olimpio Pizio del Restaurante La Dolce Vita, Cesar Márquez de la Pizzería La Gula de Viña del Mar, los guías de turismo y chóferes, y a todos los que permitieron conocer, disfrutar y vivenciar una estadía tan especial. Por último el agradecimiento a Leandro Nahim y a los colegas que nos acompañaron, con quienes disfrutamos y estuvimos “Compartiendo” este Fam Tour. Un brindis por y para todos.
Carlos Masip
Director de Compartiendo